Salud mental para mujeres ejecutivas

Posiblemente, como ejecutiva y empresaria, sabes la importancia de la salud mental y procuras proveer estos servicios a los miembros de tu equipo. Eres consciente de que al ayudarles a manejar el estrés, recibes como recompensa un aumento en la productividad.

La pregunta es: ¿y tú?, ¿Cuándo fue la última vez que sacaste tiempo para hacer yoga, respirar profundamente y disfrutar del paisaje, ir a caminar sola por el placer de hacerlo o simplemente hacer nada por un periodo corto o largo de tiempo?

Si eres como la mayoría de las ejecutivas, es probable que ni te acuerdes. Estás tan ocupada, con tantas tareas por realizar, una pila de compromisos y cuando menos te das cuenta, el día ha terminado, y todavía quedan muchas situaciones por resolver.

Una vez, hablaba con una cliente, y me decía que se sentía irresponsable si se iba a dormir teniendo aún tantas tareas pendientes. Llevaba días trabajando horarios extendidos, esforzándose por cumplir con todos sus compromisos, y se encontraba irritable, no podía pensar, y sentía que no lograba entender conceptos importantes para su labor.

Lo anterior, me recordó la historia que cuenta Stephen Covey en su libro «Los 7 hábitos de las personas altamente efectivas». Habla de que un hombre estaba cortando un árbol con un hacha sin afilar, y llevaba horas sudando, con mucho esfuerzo, y no avanzaba mucho en su trabajo. Cuando un amigo le sugiere afilar el hacha, el hombre responde que no tiene tiempo, pues está ocupado cortando el árbol.

Es un círculo vicioso en el cual podemos caer con facilidad, no nos detenemos a afilar el hacha, lo cual nos lleva a gastar más tiempo en las tareas por hacer, y cada vez tenemos menos tiempo para asegurarnos de que el hacha está en condiciones óptimas para la labor.

Es entonces que nuestra salud mental es una herramienta crucial para funcionar en el día a día, es nuestra hacha, y si no dedicamos el tiempo para afilarla, cuidarla y fortalecerla, las consecuencias son nefastas.

Hace un tiempo, en la clínica en la que trabajaba como terapeuta física, veía llegar mujeres en estado crítico de salud física, ocasionado por el mal manejo del estrés y la «falta de tiempo» para cuidarse.

Lo interesante era que, al tener que ser hospitalizadas, todas sus obligaciones quedaban en suspenso, y la vida continuaba afuera, mientras ellas se tomaban el tiempo, obligadamente, para descansar y atender su salud física y mental.

Entonces, ¿por qué no prevenir? ¿No tiene más sentido tomar tiempo para cuidar la salud mental, para sacarle filo al hacha y de esta forma ser más productivo y disfrutar mejor la vida? Como ejecutiva, ¿no deberías ser el ejemplo para los miembros de tu equipo de cuidado de la salud mental?

Si deseas que ellos aprendan a manejar sus niveles de estrés y sus emociones para crear una cultura empresarial agradable y así mejorar la productividad, ¿por qué no empezar contigo misma?

Continuando con lo que dice Stephen Covey en su libro, hazte las siguientes preguntas:

  • ¿Cuántas horas crees que ahorraría el leñador si se detuviera a amolar su hacha? ¿Una, dos, tres…?
  • ¿Cuánto tiempo ahorrarías en un día si te detuvieras a respirar profundamente por unos minutos?
  • ¿Qué impacto tendría en tus relaciones el tiempo que dedicas a cuidar tu salud mental?
  • ¿A cuánto dinero equivaldría el tiempo que dedicarías a aclarar tu mente, mejorar tu creatividad y recargar energías para continuar con tus responsabilidades diarias?
  • ¿Qué otras ganancias obtendrías al desarrollar hábitos de cuidado mental?
  • ¿Cuánto dolor físico y emocional evitarías tanto para ti como para las personas que te rodean?

Por otro lado, Covey habla también de los cuadrantes de manejo del tiempo, y el primero es el cuadrante de lo importante y urgente, donde se manejan las crisis y es altamente abrumante. El cuadrante dos son las cosas importantes y no urgentes, donde podemos estimular la creatividad y ser bastante productivos.

Pregúntate nuevamente: ¿vivo mi vida apagando incendios, resolviendo situaciones de último momento, adicta a la adrenalina? ¿O he aprendido a funcionar de una manera relajada, donde mi salud mental es la prioridad?

El cuidado de la salud mental debe ubicarse en el cuadrante dos para evitar que tarde o temprano nos encontremos en el cuadrante uno.

Si estás muy ocupado, cuidar tu salud mental no es un lujo, sino una decisión inteligente y lógica. Aquí te dejamos algunos tips para empezar:

  • Decide cuidarte y dar prioridad a tu salud mental. Este es el primer paso, ya que es algo que nadie puede hacer por ti. Es tan crucial como el hecho de que nadie más puede respirar por ti, debes hacerlo tú.
  • Busca información acerca de la salud mental y cómo cuidarla.
  • Pide ayuda. Para ser más efectivo con tu tiempo, contrata a un profesional (un coach, un consejero, un psicólogo) que te oriente.
  • Aprende la técnica de EFT/Tapping, que combina elementos cognitivos y de toque físico (basado en puntos de acupresión). Es fácil, sencilla y muy efectiva para manejar el estrés y las emociones diarias. Te dejamos el enlace de nuestro canal de YouTube donde encontrarás información al respecto.
  • Usa la técnica del Pomodoro en tu trabajo y en tu vida diaria.

La vida es corta, ten siempre presente que tu salud mental es esencial para disfrutar cada día, para gozar el proceso de la vida misma, para prosperar y tener bienestar real.

Te deseo lo mejor y que aprendas a “Caminar En Paz En Medio Del Caos”.

¿Te gustaría iniciar el cambio y cuidar más tu salud mental?

Clara Stella Arenas

Escritora del Newsletter #Miércolesdecrecimiento, Máster en EFT Tapping y coautora de los libros: Ideas para seguir Avante y El desafío de cambiar tu vida.

Fundadora | Autora del Newsletter de PAZENCAOS