SI NECESITAS UNA MANO, YO TENGO DOS

¡Qué bonito! Pero cuántas veces le permitimos a otros ofrecernos esa mano amiga, esa mano deseosa de ayudar?. Y es que pedir ayuda es tan difícil. Te sudan las manos, te da vergüenza, cambias de color y por último, se te olvida lo que ibas a decir. Hemos oído una y otra vez acerca de … Leer más